Pelayo Martín ·   10/3/2018
A última hora de la tarde de ayer, murió un obrero de una empresa cerámica de l’Alcora (Castellón) al caerle encima dos palets de azulejos mientras desarrollaba su labor como carretillero. Tenía 54 años... afortunadamente para él nadie hablará de ello, nadie guardará un minuto de silencio al comenzar un partido, nadie pondrá su foto en un periódico ni en un telediario... señal de que muy probablemente era buena persona.